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Los niños son especialmente vulnerables a la influencia de un mal clima interior debido a que sus pulmones y cerebros no están desarrollados del todo.


Las habitaciones de los niños suelen ser los peores sitios en los que estar debido a la contaminación del aire. Además de partículas tóxicas de cualquier parte de la casa, los numerosos juguetes y aparatos electrónicos que hay en las habitaciones de muchos niños también pueden ser responsables de emisiones potencialmente nocivas. En un estudio realizado recientemente en Dinamarca, se descubrió que la mitad de las familias participantes tenían concentraciones de CO2 superiores a lo recomendado por las noches en las habitaciones de los niños y que aproximadamente una de cada cuatro habitaciones multiplicaba por tres el nivel de CO2 máximo recomendado.

SÍNTOMAS

La contaminación del aire y un nivel de CO2 elevado pueden producir problemas como dolores de cabeza, dificultades para dormir, fatiga y dificultad para concentrarse. Un mal clima interior puede ser especialmente problemático para los niños por el hecho de que aún están creciendo y su respiración es más rápida que la de los adultos.

SOLUCIONES

Estas son algunas formas sencillas de reducir el nivel de CO2 y mejorar el clima interior en las habitaciones de tus hijos.

1.


Ventila con varias ventanas

El contenido del aire de interiores incluye gases, partículas, residuos biológicos y vapor de agua, todos los cuales son peligros potenciales para la salud. Te recomendamos que ventiles la casa tres o cuatro veces al día durante 10 minutos. Además, ventila los dormitorios de tus hijos por la mañana, cuando estén jugando y antes de que se vayan a dormir por la noche.

2.


El plástico no siempre es lo mejor

Cuando el plástico se calienta, puede desprender vapores tóxicos, así que asegúrate de que los juguetes de plástico de tus hijos no están expuestos a la luz solar directa. Tampoco dejes objetos de plástico en el suelo si tienes calefacción radiante. Según las normas de la UE, deberías deshacerte de los juguetes de plástico anteriores a 2007, ya que se ha descubierto que contienen sustancias químicas prohibidas. Si tienes espacio suficiente, podrías plantearte animar a tus hijos a que jueguen en una habitación que diferente a su dormitorio. Esto ayudará a reducir la cantidad de contaminantes potencialmente dañinos en el aire. Colocar algunas plantas en una habitación también puede mejorar el clima interior, ya que ayudan a eliminar el exceso de CO2.

3.


Limita la humedad y combate los ácaros

El 65 % de los europeos secan la ropa en el interior de casa al menos una vez a la semana, y esta es una mala costumbre. La ropa desprende humedad al secarse, lo que puede generar moho y humedad nocivos en la casa, así que intenta secarla en otra parte si es posible. Por el mismo motivo, asegúrate de ventilar bien el baño. Además, a los ácaros les encantan las camas, así que cambia las sábanas con frecuencia. Piensa también en cambiar los colchones y las almohadas si hace mucho tiempo que los tienes. Un colchón usado normal puede tener entre 100 000 y 10 millones de ácaros en su interior, y el 10 % del peso de una almohada con dos años de antigüedad puede deberse a los ácaros muertos y sus restos. 

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TEN UNA VISIÓN AMPLIA

Además de nuevas rutinas diarias, también es importante aprovechar las oportunidades de realizar cambios fundamentales en el clima interior de tu casa. Pasamos el 90% de nuestro tiempo en interiores, y dos terceras partes de ese tiempo las pasamos en casa, por lo que es el lugar ideal para empezar a mejorar tu vida en el interior.

 

Mejora tu espacio actual

Piensa en la manera en la que puedes "meter el exterior en el interior". Como la mayoría vivimos en entornos urbanos, hasta cierto punto nos hemos aislado de la naturaleza. Algo tan sencillo como poner unas plantas en macetas –que se sabe que purifican el aire– puede mejorar el ambiente en el interior. Además, piensa en cómo podrías mejorar la vista del exterior con el uso inteligente de las puertas y las ventanas.

Haz crecer tu espacio de forma adecuada

Aumentar unos metros cuadrados tu casa es una forma estupenda de mejorar tu vida en el interior. Piensa en reformar el ático o en ampliarlo y da prioridad a las soluciones que aporten aire fresco y luz natural.

Mudarse

Cuando busques una nueva casa, ten en cuenta que los edificios más antiguos pueden tener problemas que afecten al clima interior. Por ejemplo, asegúrate de que todas las ventanas se abran del todo y funcionen bien, en especial en la cocina y el baño. Además, cuando llegues a la fase de la decoración, elige un color de pintura más claro. Esto creará superficies que reflejarán la luz mejor en tu casa.


LA LUZ NATURAL PUEDE MEJORAR LA CAPACIDAD DE APRENDIZAJE DE TUS HIJOS HASTA EN UN 15%

La ciencia demuestra que las aulas bien iluminadas con luz natural mejoran la efectividad del aprendizaje con respecto a las que no lo están. No hay ninguna razón para creer que estos beneficios no se apliquen también al hogar y al lugar de trabajo.

¿QUÉ PUEDO HACER YO?

Hay muchas formas de mejorar el aire y la luz natural en tu hogar. Algunas son rápidas y fáciles, mientras que otras requieren más tiempo, pero te proporcionarán importantes mejoras a largo plazo.